Es difícil adivinar éste déficit pero si atiendes, quizás lo descubras...
Cuando quieres leer y entender santo y señal
hay una canción en tu cabeza que no puedes desechar,
que te hace mover dedos de pies,
y una conversación ensayándose y una lista
de las cosas que querrías hacer pero no harás.
Pon a calentar agua en la estufa: la vas a olvidar.
Alguien toca a tu puerta y te conversa
y, cuando vuelves la vista, la cocina está incendiada.
A veces llega tu mejor fortuna y no le observas interés.
Al chiste más simple no le escuchas el color.
Es un tanto cómico para ti, para mí, para todos.
Y no se puede comprender.
No hay comentarios:
Publicar un comentario